De las dudas infinitas

....."Pequeña de las dudas infinitas, aquí estaré esperando mientras viva. No dejes que todo esto quede en nada, solo porque ahora estés asustada"...

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Él un chico calculador y frío pero con una sonrisa espectacular. Ella una pequeña loca que adora los gestos de cariño aunque sea en público. Él siempre pendiente de lo que tiene a su alrededor y de no llamar excesivamente la atención. Ella a veces no se da cuenta ni de donde está y de quien la observa.

Él trabaja como profesor de música en un conservatorio municipal y ella es una de sus alumnas. Se ven tres días por semana. Ella suele llegar antes de su hora habitual, solo para poder verlo un rato a solas antes de que lleguen los otros alumnos. El está allí esperando a que lleguen todos, pero se nota que su cara se ilumina al verla llegar y que sus labios vibran igual que si estuviesen dentro de la boquilla de su trompeta.

Él le muestra instrumentos de su colección privada, Fliscornos, trompetas, pícolos,  le toca algún bolero o le cuenta alguna anécdota de los años de su formación como trompetista. Por supuesto que a ella se le cae la baba. 

Abrázame fuerte, pedía él en silencio. Ella buscaba la manera de acercarse y darle esos abrazos, pero a veces es imposible abrazar a alguien aunque lo tengas enfrente.

Pero son solo eso, una duda infinita. Y en eso se quedan, en una duda infinita. ¿Por qué hay dudas en nuestras vidas? ¿Es por qué no preguntamos? ¿Es por qué hacemos las preguntas equivocadas? 

¡¡¡  Siempre serás mi duda infinita !!!!

Aunque la mayor duda que puede tener una persona es cuando ha perdido a alguien y nunca más volverá a hablar con esa persona.

Perder a alguien, ¿Cómo se puede perder a alguien? Yo puedo perder un mechero o las llaves pero "a alguien?" y no hablo de perderse en un centro comercial, eso no sirve. Perderse, una palabra que puede producir la angustia más terrible o el placer más maravilloso. 

Hanna