miércoles, 22 de octubre de 2014

En conexión


Era un día de lluvia. No era de esos días que desde que te levantas llueve, no. Las primeras horas de la mañana eran soleadas, pero poco a poco el día se había convertido en gris.
De repente, en un abrir y cerrar de ojos, la lluvia sorprendió a todos en plena calle. Estas lluvias me encantan. Me gusta ver el comportamiento de la gente cuando les ocurre algo que no esperan. No esperan que llueva, entonces se empapan porque no llevan paraguas, o llevan chanclas que resbalan horrores, o alguna presumida que acaba de salir de la peluquería va haciendo zig-zags imposibles por debajo de cornisas y balcones protegiendo su peinado.

A mi me encanta la lluvia, y no es una forma de hablar. Si llueve y me pilla en medio de la calle, no voy corriendo como otros transeúntes. Disfruto mojándome, empapándome de su olor y de su sabor. Mi pelo mojado se pega a mi cara y a mi blusa. Me siento libre , ¿hay mejor sensación que la de ser libre?.

El día está bastante oscuro y realmente no percibo las caras de la gente con la que me cruzo. Entre otras cosas porque la gente tiende a caminar con la cabeza agachada cuando llueve. Sólo veo cuerpos con cocorotas al frente y alguna incluso tapada con el brazo a modo de visera o paraguas. Entonces ahí es cuando pienso...¿qué más dará mojarse el brazo o la cara? Es agua!!

En mi lento caminar hacia el cajero automático, voy pensando en la maldita manía que tengo de gastar dinero, en los pagos que tengo que hacer y en lo mucho que me gustaría invitarte a cenar.
En mi cabeza hay todo un cocktel de pensamientos que no tienen nada que ver a veces los unos con los otros, pero mi cabeza es de pensamiento "rápido". Voy de la economía al amor, o de la amistad al trabajo en cero coma segundos.

Llego al cajero. Justo al lado hay un ventanal que a su vez hace de espejo y entonces tengo la sensación de que pasas con tu perro. Me giro, pero no eres tu. A veces tengo la sensación de verte en todos lados.
He tardado tanto en volver a girarme a recoger mi tarjeta y mi dinero, que el cajero del demonio ha decidido engullirlo todo por mi seguridad. ¿Por mi seguridad?, ¡Vamos no me jodas! ¡En el siglo que estamos! En esos casos en los que una esta lenta, lerda, embobada, o charrando por el móvil el cajero debería darnos una segunda oportunidad.

"Introduzca de nuevo el PIN para recuperar su estupidez, sería un buen mensaje en la pantalla" 

Recojo mi frustración y me dirijo a casa caminando. En el trayecto, voy mirándome en los escaparates. A todo el mundo le gusta caminar por la calle mirándose en los escaparates, pero no reconocen que es así.
Otra vez ocurre, ahí reflejada veo tu silueta de perroflauta. En ese momento, aparte de disfrutar de la vista, mi mente vuelve a tener una explosión de pensamientos pero esta vez no hay mucha mezcla. Mis pensamientos son sobre ti. Lo que te quiero hacer, donde te llevaria a cenar, como volver a tenerte, cuanto te echo de menos en este momento, etc.. Entre la lluvia, la confusión de si eres o no eres tu y la frustración del cajero. Mi voz en off acaba de cortocircuitarse y voy hablando en voz alta;

"¡Maldita sea!, debería mandarte un whatsapp para decirte que quiero invitarte a cenar."

Un chico que pasa por mi lado contesta.- "Yo estoy disponible, guapa". Por eso me he dado cuenta que he vuelto a hablar en voz alta.
Como no tienes Internet en el móvil, en ese momento pienso que mi whatsapp sólo te llegará cuando llegues a alguna WIFI robando señal con las mismas ganas que me robaste el corazón y borro rápidamente el texto que acababa de escribir.

"Me pareció verte hoy. Te echo de menos, llámame y quedamos para cenar."

Llego a casa, me quito la ropa mojada, y después de una ducha caliente, me sirvo una copa de vino. Dicen los cardiólogos que el vino es bueno para el corazón. ¡Qué cachondos!
Me quedo dormida en el sofá y a las dos de la madrugada me llega un Whatsapp;

"Me pareció cruzarme contigo. Incluso di la vuelta porque tenía dudas de si eras o no. Te echo de menos, y me gustaría verte"


Dedicado a mi perroflauta amante de Clara)





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